miércoles, septiembre 12, 2012
sábado, septiembre 08, 2012
Nuevo Testamento
Ahora que me he puesto
a pensar
pienso.
Se trata de tu trato
y sobre esas calles
de sencillos frutos
que me diste a probar.
Soplaste.
Era el génesis
creciente
que me comprometía
de forma natural
así de la nada
como cuando de momento
tiembla la tierra y se
abre
y uno mira y hay un
cielo
y hay una luna
y una mitad de luna frente
al sol.
Pensar que te quería
con la inverosimilitud
de las telenovelas.
Cómo no hacerlo
si estaba tan
desamparada
en tu mundo de todo,
de nadas
en el que solo éramos.
Ahora que me he puesto
a pensar
me ha dado con
llorarte.
Cómo no hacerlo
si metiste en mi cama
a ese amante
con turnos de ofendido
para las metáforas.
Ahora que me he puesto
a llorar
me ha dado con amarte.
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