lunes, diciembre 29, 2014

De frente



Acabo de dormir todo el cansancio del mundo
la sensación a neblina en los ojos desapareció
la llaga ciega que todo lo consumía además.

Acabo de despertar.
La sensación dulce a temblor nuevo me posee
en el andamio óseo que sostiene el horizonte.
Construye.

Solía, sin oxígeno, chamuscada la piel
con huellas de un reptil veneno
entablada en conversaciones extintas
bajo árboles  secos y sudorosos .

Pero cuando una abre los ojos
estira la boca, las piernas,
los hombros, los brazos, el cuello
el corazón
llega al espejo del baño
para recibir a la mujer despierta y hambrienta.