domingo, agosto 18, 2013

Palomas en el alero


http://www.avikatz.net/report/jrep2/peace-process/dove/doves.htm


¿Acaso conmueve
si en el anónimo sigilo
de un alero
muere un ave?

Pero si acaso
-¡Dios se apiade!-
tu mirada-espada
no es para mi nombre.
Si acaso tu mano
-carbón-rojo de las lunas-
sesteara en las batallas
de otros reinos.
-Por si acaso-:
Traspásame tu filo.
Ara con tus uñas
la calidez de mi cuerpo-verano.

¿No es acaso cierto
el deceso del plumaje?
Nadie sabe cuándo.
La poeta-noche no lo sabe.
Solo sé: sin tus ojos, sin tus manos
sé que no sabré qué hacer.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Si mis manos y mis ojos no estuviesen fijados en ti. Mi corazón no existiría por que dejara de latir.